Me desperté y pude girar levemente mi cuerpo hacia el borde de mi tabla y me deje caer, tan lento que me dio tiempo a recordar toda mi vida.
El impacto no fue tanto como el terror,la angustia y el mal estar que sentí al verme.
Mi cuerpo estaba débil , no era capaz de poder distinguir los colores.
El impacto no fue tanto como el terror,la angustia y el mal estar que sentí al verme.
Mi cuerpo estaba débil , no era capaz de poder distinguir los colores.
Me sentía cansada,con el cuerpo lleno de vendas,sin saber que es lo que podrían envolver, me picaba y mis patas no me permitían rascarme.
Me incorporé y por fin pude encontrar en aquel lugar tan frío un rostro conocido que me ayudo a a levantarme,que me dejo con cautela en la tabla otra vez, poniéndome así una inyección que me dejaría sedada durante un largo tiempo.
Me incorporé y por fin pude encontrar en aquel lugar tan frío un rostro conocido que me ayudo a a levantarme,que me dejo con cautela en la tabla otra vez, poniéndome así una inyección que me dejaría sedada durante un largo tiempo.
Soy tu compañera de clase y blog Elián. Me ha recordado en cierto modo a la Metamorfosis de Kafka. Me ha dado la sensación de que hablabas desd el cuerpo de un perro. ¡Buen trabajo!
ResponderEliminarHola Alba, soy Iria, tu compañera de clase. Me ha gustado mucho tu cuento. Se ve una clara inspiración en kafka pero veo que está muy bien redactado. Sigue así, no dejas de sorprenderme.
ResponderEliminarSoy Carlos Canales de 1ºCB y me ha gustado tu cuento ya que aunque sea breve se ve reflejado muy bien el objetivo y está muy bien redactado. Un beso
ResponderEliminarHola Alba,soy Ana, tu compañera de clase. Me gusta tu cuento porque se ve con claridad lo que quiere reflejar y esta muy bien redactado.
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